martes, 25 de junio de 2013

RONDA DELS CIMS - (ABANDONO)

Un año y medio soñando con ella. Medio año preparándola todo lo que buenamente he podido, que ha sido más bien poco. Un mes sintiendo el miedo. Y todo, ¿para qué? pues ni más ni menos que para aprender. Aprender, debería decir mejor asentar conocimientos, de que en las carreras, y voy a hacer de filósofo de bar y decir que también en la vida, hay que disfrutar de cada pequeño instante como si fuera el último y el más importante. Que en un instante, sin saber porqué ni como, sin saber qué hacer para solucionarlo, sin poder optar por otro camino, sin merecerlo, la carrera, la vida, tal y como la programaste, tal y como la entendiste, tal y como la soñaste deja de existir.

Aprender que esto no tiene porqué significar un peor final, tan solo uno distinto. Que tan solo significa que algo o alguien o tú mismo te a echo cambiar de camino. Que solo queda asumir que es imposible ganar todas las batallas pero si que es posible ganar todas las guerras si eres capaz de, como dice la canción: reír y remar y cantar.

Todo esto viene que a abandoné la Ronda dels Cims en el kilómetro 41 de los 170 de la carrera. A las 11 horas de las 50 que tenía previstas.

No quiero hablar de la belleza del recorrido. Ni de la excelente organización. Ni de los campeones Nerea y Salva con los que tuve el placer de hablar un ratito. Ni de los voluntarios siempre fantásticos. Ni de las bellas y simpáticas chicas andorranas. Ni de los chicos del foro y mis amiguetes que nos siguieron en directo. Ni de mi amigo Carlos que sufrió tanto como yo cuando abandoné y un poco más cuando tuvo que hacerlo él.

Tan solo quiero darle las gracias a la sanitaria que estuvo conmigo, cuidándome y controlando mis constantes durante nada menos que una hora y media. No se tu nombre, pero espero no olvidar nunca tu cara. Gracias maña.

Y el año que viene, sin obsesión, espero volver a estar en la salida de la Ronda. No me importará estar o no en la llegada.

Roberto


jueves, 13 de junio de 2013

LA BELLEZA. INTEGRAL DE GUARA

Nunca dejará de sorprenderme la sierra de Guara. Nunca dejarán de extasiarme la discreta rotundidad de su belleza, agazapada detrás de todos sus rincones, dispuesta a hacerte parar de correr y dejarte turbado por un instante sin saber por qué o para qué has venido aquí, pero dando las gracias por estar ahí.

Como dijo el sabio "pequeña sería tu belleza si fuera yo capaz de describirla con palabras".

Bella pero hijaputa como la que más. De esas japutas que te hacen sufrir pero te gusta tanto que vuelves a por más. Y a por más. Y otra vez. Y al final ya no sabes si vuelves por la belleza o a que te de pol ..... Vicios que tiene uno.

Bueno, que me voy a temas para los que tengo pocas historias que contar. La carrera.

No murieron primogénitos ni bajó sangre por los ríos pero, atención noticia: llovió. Está siendo raro esta "invier-vera" que llueva. Pero este finde llovió. Salimos con lluvia a eso de las 8:30 todo rectos hacia el barranco de La Pillera que bajaba bien llenico de agua. Lo cruzamos, creo recordar que ocho veces. Al salir del barranco enganchamos la subidica al collado de Petreñales.

Como en mis buenos tiempos voy en el furgón de cola. Pero al pasar el avituallamiento del collado una emergencia técnica de alto nivel determina mi posición de farolillo rojo. Tan a gusto debía de estar que si me despisto un poco más me pasa el corredor escoba. Verme tal cara de gozo hízole apiadarse de mi alma y diome unos metros de ventaja.

Bien. Por fin. Lo conseguí. Tres años entrenando para esto. Voy el ultiiiiii. No el penulti, ni el antepenul. No. El ulti del todo. Y con diferencia. Qué sensación. Ahora entiendo al Kilian. Sólo me queda disfrutar durante otros 30 km, pensaba yo. No, no, no. Te equivocas zagal. ¿porqué? por que ahora viene HUMOR AMARILLO.

LAS ZAMBURGUESAS.
Bajando el collado de Petreñales buscando la ermita de La Fabana tenemos que cruzar el barranco del Abadejo, con más agua quel Ebro y más piedras que una cantera, dispuestas ellas por la organización de manera y forma que te hacían creer que eras capaz de pasar el barranco botando de piedra en piedra sin caer en la gélidas aguas. Pues no. Mentira. Te caes y te mojas.

LA PEDRERA MALDITA
La subida al Montidinera es por una pedrera. Y como iba el últi, no perdón el penul que en las zamburguesas alcancé a Santiago, todos mis compañeros precedentes se habían tomado la molestia de llenar las piedras de barro para que esbarizaran más. Si conseguías dar un paso sin caer dos para atrás sonaban las trompetas celestiales. Aquí pillamos a David

EL ESBARIZACULOS EMBARRADO
Que tenemos que bajar a un colladete, no problemo, qué mejor forma de hacerlo que por un esbarizaculos embarrado con pendiente tendiente a infinito. Al final los de la protectora de animales obligaron a la organización a poner una cuerda. Nenazas.
Aquí pillamos a Carlos y David se nos quedó por detrás.

LA CRESTA DIABÓLICA
Que tenemos que subir al Fragineto. Pues se sube. Que tenemos que volver al collado de Petreñales, pues vamos a ir por la cresta más afilada del mundo mundial. Que después de ver las fotos me alegro de las nubes  cubrieran todo porque si llego a ver el berenjenal en el que nos metieron para rato voy. Bueno, vale, no voy a mentir: si llego a saber que la cresta era tan criminal me llevo la cámara de fotos.

EL SUBIDÓN SUBIDÓN
Venga va, que ya queda poco dicen los del control. Ummmm, si esto es el KM 21, significa que vamos por la mitad, luego me queda la otra mitad que son 21 km. Menos un trozo que han anulado = joderrrrrr lo que me queda. Ala, parriba pal Tozal. Algunos van jurando en arameo mientras otros vamos haciendo cuentas de cuántas Integrales de Guara necesito sumar para tener una Ronda dels Cims. nononoono, no pueden ser tantas. Mejor pienso en otra cosa.

EL DRAGONKAN
Llegamos a la cima del Tozal donde nos encontramos con una de esas cosas que solo se pude ver en una carrera de este tipo: a 2ºC, lloviendo y con viento huracanado cuatro personas sonriendo nos esperan para darnos un poco de agua o de isostar. La buena mujer que me preparó el isostar revolvió los polvos con tanto cariño como hacía mi madre con el Colacao para que no hiciera grumos. No hay manera de agradecer la labor de esta gente. Los de la cima y los cualquier otro punto.

LA LLEGADA
Llegamos a meta y me hago el perro para fichar el último con la secreta esperanza de, por fin, ser el farolillo rojo de una carrera. Esperanza truncada un cuarto de hora después cuando llegó David. Pues que sepáis que voy a impugnar, que llegó fuera de control. Así que el último soy yo.

Nos encontramos a Jurraez que ha llegado DOS HORAS antes que nosotros. jope cómo está de fuerte. Felicito a Javisa porque, sin lugar a dudas, esta es la carrera más espectacular que jamás he hecho. Me ha dejado tan alucinado que seguro que este verano la repito por mi cuenta, incluyendo eso sí la parte anulada por el mal tiempo y que Javisa describió como la más bonita del recorrido. Tron, que te contraten para trazar más carreras, que lo bordas.

Y como siempre unas foticos para ilustrar al personal (y como casi siempre casi todas de Monrasín)











domingo, 2 de junio de 2013

And the wind blows Mary - Els Bastions Skyrace

Yo no se qué hemos hecho, pero en algún lugar del espaciotiempo sideral la hemos debido de liar parda. Pero ni idea de en qué.

Después de pasar el año pasado en la TM más calor que en el horno de una panadería, de ser tratados como parias en la Isostar del mismo año, haber pasado hambre en la Ultra de Xerta de este año y conseguir ahogar a las ranas en la Ultra de Barcelona ya solo nos quedaba que el viento fuera el culpable de la cancelación de Els Bastions de este año.Ahora me queda la duda de si en Andorra los ríos se convertirán en sangre o de si morirán los primogénitos. Glups qué tensión. Si fuera en Francia tendría clara mi preferencia. Pero para Andorra deseo ninguna de las dos.

En serio, jodo que aire. Ostia co, qué manera de soplar. Hablan de rachas de 150 Kmh y me parece que se quedan cortos. En el col de la Clovil, típico monte pelao de 2.000 metros, era absolutamente imposible ir derecho. A veces era imposible avanzar. No podía siquiera usar los bastones porque se me los llevaba el viento y me se cruzaban en las piernas. Pensé en grabarlo pero no tuve valor ni fuerzas para sacar la cámara. Pensé: si me paro ahora caigo rodando para atrás.

Cuando Carlos me alcanzó pude gritarle: esto va a ser inhumano.

Visto con perspectiva veo que sabía que iba a ser un infierno. Y sabía que lo que nos quedaba, a más altura, de noche y cansados iba a ser todavía peor. Sin embargo estaba más preocupado por mi rodilla que por las condiciones de la carrera. Me tengo por un tipo sensato, de los que saben valorar el riesgo y conoce muy bien sus propias capacidades. Yendo solo he dado muchas veces la vuelta y me siento orgulloso de las veces que he abandonado una ultra. Sé lo que hago.

Antes de ayer no sabía lo que hacía hasta que un miembro de la organización me dijo: hasta aquí hemos llegado. No hicieron falta explicaciones ni datos meteorológicos ni excusas, en un instante entendí que, en esas condiciones, era una estupidez continuar. Y creo no equivocarme si digo que los 40 ó 50 participantes a los que nos pararon en Planoles pensaban exactamente lo mismo.

Hasta antes de ayer, cuando leía los debates sobre si, en caso de malas condiciones meteorológicas, el organizador debía suspender la prueba o confiar en la capacidad del corredor o sobre la cantidad de material obligatorio a llevar, no sabía de qué lado ponerme: la organización tiene una responsabilidad si, pero yo ya soy mayorcito y sé lo que hago.

Hoy lo tengo claro: la opción más segura para el corredor es la correcta.

Así que agradezco a la organización que parara la prueba. Si Dios y sus plagas lo permiten el año que viene nos vemos por allí. Porque la carrera bien lo merece.

Escuchemos al amigo Hendrix para que nos cuente que dice el viento y nos quite el mal gusto


Y unas fotitos