Nunca dejará de sorprenderme la sierra de Guara. Nunca dejarán de extasiarme la discreta rotundidad de su belleza, agazapada detrás de todos sus rincones, dispuesta a hacerte parar de correr y dejarte turbado por un instante sin saber por qué o para qué has venido aquí, pero dando las gracias por estar ahí.
Como dijo el sabio "pequeña sería tu belleza si fuera yo capaz de describirla con palabras".
Bella pero hijaputa como la que más. De esas japutas que te hacen sufrir pero te gusta tanto que vuelves a por más. Y a por más. Y otra vez. Y al final ya no sabes si vuelves por la belleza o a que te de pol ..... Vicios que tiene uno.
Bueno, que me voy a temas para los que tengo pocas historias que contar. La carrera.
No murieron primogénitos ni bajó sangre por los ríos pero, atención noticia: llovió. Está siendo raro esta "invier-vera" que llueva. Pero este finde llovió. Salimos con lluvia a eso de las 8:30 todo rectos hacia el barranco de La Pillera que bajaba bien llenico de agua. Lo cruzamos, creo recordar que ocho veces. Al salir del barranco enganchamos la subidica al collado de Petreñales.
Como en mis buenos tiempos voy en el furgón de cola. Pero al pasar el avituallamiento del collado una emergencia técnica de alto nivel determina mi posición de farolillo rojo. Tan a gusto debía de estar que si me despisto un poco más me pasa el corredor escoba. Verme tal cara de gozo hízole apiadarse de mi alma y diome unos metros de ventaja.
Bien. Por fin. Lo conseguí. Tres años entrenando para esto. Voy el ultiiiiii. No el penulti, ni el antepenul. No. El ulti del todo. Y con diferencia. Qué sensación. Ahora entiendo al Kilian. Sólo me queda disfrutar durante otros 30 km, pensaba yo. No, no, no. Te equivocas zagal. ¿porqué? por que ahora viene HUMOR AMARILLO.
LAS ZAMBURGUESAS.
Bajando el collado de Petreñales buscando la ermita de La Fabana tenemos que cruzar el barranco del Abadejo, con más agua quel Ebro y más piedras que una cantera, dispuestas ellas por la organización de manera y forma que te hacían creer que eras capaz de pasar el barranco botando de piedra en piedra sin caer en la gélidas aguas. Pues no. Mentira. Te caes y te mojas.
LA PEDRERA MALDITA
La subida al Montidinera es por una pedrera. Y como iba el últi, no perdón el penul que en las zamburguesas alcancé a Santiago, todos mis compañeros precedentes se habían tomado la molestia de llenar las piedras de barro para que esbarizaran más. Si conseguías dar un paso sin caer dos para atrás sonaban las trompetas celestiales. Aquí pillamos a David
EL ESBARIZACULOS EMBARRADO
Que tenemos que bajar a un colladete, no problemo, qué mejor forma de hacerlo que por un esbarizaculos embarrado con pendiente tendiente a infinito. Al final los de la protectora de animales obligaron a la organización a poner una cuerda. Nenazas.
Aquí pillamos a Carlos y David se nos quedó por detrás.
LA CRESTA DIABÓLICA
Que tenemos que subir al Fragineto. Pues se sube. Que tenemos que volver al collado de Petreñales, pues vamos a ir por la cresta más afilada del mundo mundial. Que después de ver las fotos me alegro de las nubes cubrieran todo porque si llego a ver el berenjenal en el que nos metieron para rato voy. Bueno, vale, no voy a mentir: si llego a saber que la cresta era tan criminal me llevo la cámara de fotos.
EL SUBIDÓN SUBIDÓN
Venga va, que ya queda poco dicen los del control. Ummmm, si esto es el KM 21, significa que vamos por la mitad, luego me queda la otra mitad que son 21 km. Menos un trozo que han anulado = joderrrrrr lo que me queda. Ala, parriba pal Tozal. Algunos van jurando en arameo mientras otros vamos haciendo cuentas de cuántas Integrales de Guara necesito sumar para tener una Ronda dels Cims. nononoono, no pueden ser tantas. Mejor pienso en otra cosa.
EL DRAGONKAN
Llegamos a la cima del Tozal donde nos encontramos con una de esas cosas que solo se pude ver en una carrera de este tipo: a 2ºC, lloviendo y con viento huracanado cuatro personas sonriendo nos esperan para darnos un poco de agua o de isostar. La buena mujer que me preparó el isostar revolvió los polvos con tanto cariño como hacía mi madre con el Colacao para que no hiciera grumos. No hay manera de agradecer la labor de esta gente. Los de la cima y los cualquier otro punto.
LA LLEGADA
Llegamos a meta y me hago el perro para fichar el último con la secreta esperanza de, por fin, ser el farolillo rojo de una carrera. Esperanza truncada un cuarto de hora después cuando llegó David. Pues que sepáis que voy a impugnar, que llegó fuera de control. Así que el último soy yo.
Nos encontramos a Jurraez que ha llegado DOS HORAS antes que nosotros. jope cómo está de fuerte. Felicito a Javisa porque, sin lugar a dudas, esta es la carrera más espectacular que jamás he hecho. Me ha dejado tan alucinado que seguro que este verano la repito por mi cuenta, incluyendo eso sí la parte anulada por el mal tiempo y que Javisa describió como la más bonita del recorrido. Tron, que te contraten para trazar más carreras, que lo bordas.
Y como siempre unas foticos para ilustrar al personal (y como casi siempre casi todas de Monrasín)
Grande torperto!!
ResponderEliminarMi chaval está loco por ver cuándo puede conseguir el siguiente libro de Juego de Tronos, pero yo más por conseguir tu próxima crónica. ¡¡eres un crack!! y en cuanto a esa vuelta que te quieres dar siguiendo el recorrido avísame que voy contigo... ¡¡enhorabuena al farolillo rojo más divertido del mundo mundial!!
ResponderEliminarpues con lo que me va a costar la próxima carrera me va a salir una crónica más larga que el libro ese.
EliminarVete apuntado un fine de agosto con buen tiempo para repetirla, pero tu con una piedra de 5 kilos de hándicap que si no no vale.