miércoles, 21 de agosto de 2013

Alpine Jobs Cap. II. Los Infiernos

Después de la caminata del jueves tocaba dar un pasito más en  mi evolución alpinística. El objetivo iba a ser subir a los Infiernos desde los ibones Azules y bajar por el collado de Pondiellos. Alpino que te rilas, con neveros cara arriba y cara abajo, con neveros de lado, con trepadas, con destrepadas. Póngame un completo que lo compro.

Como hace poco más de un mes ya rondé por aquí intentando subir a los Infiernos, intentona desbaratada por el mal tiempo, me tomo llegar a la cumbre como objetivo único. Nada de para a echar afotos, ni a ver cascadas, ni a hablar con el personal, ni a echar cervezas en el refugio. Todo tieso para arriba.

El sendero que sube al refugio de Bachimaña está lleno de excursionistas con poca pinta de montañeros. Pienso y deseo que a ninguno de estos se le ocurra pasar del refugio o, como mucho, de los ibones Azules. Me llamó la atención un numeroso grupo que parecía recien salido del Port Aventura. Si es que una señora llevaba una mochila Samsonite. Jódete, que no se piensen que somos pobres. Me tuve que comer mis pensamientos cuando vi que la expedición la encabezaba nada más y nada menos que un guía. Enhorabuena a esta gente: muy bien por vosotros.

Sigo hacia el refugio donde una atractiva madurita me pregunta por mi compañero. ¿mi compañero? Si yo voy solo y no he adelantado a nadie con camiseta amarilla como la mía. Ustéd se ha equivocado. Nooooo, paraaaa, ahora lo veoooo. Tu lo que quieres es rollito. Pués lo siento pero yo he venido a subir un 3.000 no ha tener sexo ardiente con una atractiva extraña. Fuera tentaciones.
Merece la pena subir solo por ver esto




La marmolera en todo su esplendor

Sigo a buen paso hacia arriba y, ¿premonición?, antes de llegar al primer ibón Azúl me lío de camino y lo hago por la margen opuesta a la que va el GR. Hala, a trepar tocan. Cruzo la poca nieve que queda, hay que ver cómo han menguado los neveros en menos de un mes, y llego al collado de los Infiernos. Me encuentro a dos atractivas jóvenes que están almorzando. Estas no me devuelven ni el saludo. Vamos, que también quieren rollo, solo que estás utilizan el truco del almendruco de ir de duras.
En lugar de a las chavalas me quede embobado mirando a esta dama

Que no, que hoy no os toca. Tendreis que intentarlo otro día. Porque lo intentaréis ¿verdad?. No espero su respuesta y comienzo la ascensión a la cima. Guau!!!! comienza el tramo alpino de verdad. Ala a trepar hasta la cima. Con un poco de esfuerzo, menos del que pensaba, llego a la cima, marcada con un palo hincado en un montón de piedras. Saco la cámara, me peino, sonrío, me doy media vuelta para pillar un mejor ángulo y ...... veo que la cima está más arriba. ¡Ya decía yo que había sido muy corta la subida.

Sigo para arriba y, esta vez si, llego a la cima. A la primera de las tres que están conectadas por una cresta aérea de cojones, pero con clase. De mármol nada menos. A ver si en los Alpes o en los Himalayas tiene crestas de mármol. Ni de coña vamos, ni de coña.

Según el mapa que tan perfectamente había estudiado y que me sabía al dedillo, mapa que llevaba en la mochila pero que no saqué porque, recuerdo, me sabía al dedillo, había un camino para llegar hasta el collado de Pondiellos y, desde allí, al Balneario de Panticosa. Veo el primer hito y ...... no vuelvo a ver otro hasta .... hasta muuucho tiempo después. Demasiado.
Ibones de Pondiellos. Solo queda lo peor

Tela el embolado en el que me metí. Tela. No conseguía bajar ni tirándome con parapente. Jodo petaca la embarcada. Del camino ni rastro. Tan solo destrepando. Deshaciendo camino. Volviéndolo a hacer. Yendo a los lados buscando un destrepe menos arriesgado. Sin saber qué hacer con el bastón. Sin saber que hacer con la mochila. Sin saber qué hacer con mi alma. Sin atreverme a volver porque no quería enfrentarme de nuevo a los destrepes.

Por fin, tan solo una pared quedaba entre mi cuerpo y los salvadores ibones de Arnals. Recordaba que el plano marcaba que por los ibones pasaba un sendero que comenzaba en una cota superior. Saco el mapa de la mochila para localizar el sendero y no ir dando tumbos y ...... ¡¡¡¡¡no hay sendero por encima de los ibones!!!! ¿dónde coño estoy? ¿esos son los ibones que veo en el mapa??? Si, tienen que ser esos, no hay otros. Entonces ¿dónde coño estoy? ¿por dónde coño he bajado? 

Abro mi campo visual, abro mi mente y veo que ¡¡¡¡¡me he equivocado de collado!!!! que no he pasado por Tebarray sino por otro que hay un poco antes ¿pero si la huella era tan clara???? La huella en la nieve llevaba directamente hacia este collado no hacia el siguiente. Ya en casa verifico con el GPS que efectivamente me he metido por el collado anterior al de Pondiellos, que en mi mapa no tiene ni nombre pero en otros lo llaman de Arnales y, buscando buscando, encuentro una ruta que sigue la huella que seguí yo pero que, sin perder cota, pasa al collado de Pondiellos y, de allí, baja al Balneario por un canchal.

Pero por mucho que busco no encuentro que nadie haya bajado por donde yo. Shackleton me llaman ahora. Valiente pero pobre.

En próximos capítulos .......  de Isawtwo a Café Aragonés pasando por .....

ALPINE JOBS Cap I. La Moleta - Pala de IP

Llega ya el momento de sacar provecho a tanto entreno, tanta ultra, tanta serie. Llega el momento de usar lo aprendido y asimilado en tanta prueba controlada para hacer lo que realmente quiero hacer: vagabundear por el monte.

Así que, aprovechando el puente, me planteo hacer una ruta de cuatro días por el Piri. Me compro la tienda de campaña ultraligera, me compro el saco, desempolvo la esterilla y la mochila grande. Leo mapas, estudio mapas, planeo rutas que no llevan a ninguna parte. Miro previsiones meteorológicas, meto la ropa adecuada a la mochila. Me veo durmiendo  en el hotel de las mil estrellas. Me veo al alba desayunando un cafe del polvos. Sonriendo. Contando los días para que mi pequeña comparta esto conmigo. Si le gusta, si le apecete.

Y entonces va y no me llega el saco. Y con el que tengo pasas frío en agosto en Zaragoza así que no ha lugar a plantearse ir al monte con él. Cambio de planes. Toca hacer rutas de un día pero, al menos, intentaré mantener en lo posible el inicial espíritu de vagabundo. Nada de horarios, nada de rutas fijas, nada de GPS.

Con esa idea me planto en Canfranc y encaro la subida a La Moleta, subida que ya hice en la Maratón del año pasado. Esta vez la disfruto más. Y eso que la mochila y las piernas pesan más. A la salida del bosque me encuentro una cinta de plástico todavía colgada de un pino. Sin duda se les pasó retirarla la semana pasada, así que entiendo que debo quitarla de ahí. 

Después de ganarme el cielo, otra vez, continúo hacia la cima. Y, como anticipo de lo que al día siguiente iba a venir, pierdo los hitos y alcanzo la cima desde el Norte, desde Iserías. A los cuatro excursionistas que hay en la cima les tengo que explicar varias veces que vengo de Canfranc por el carretón pero que no es que me haya perdido, es que he llegado a desde la dirección contraria porque en mi religión se hace cima mirando al Everest. Me parece que no se lo creen.

Vista desde la Moleta
Las vistas desde aquí son soberbias. Puedo ver perfectamente el camino que me llevará a mi siguiente destino: la Pala de IP.
Fácil y espectacular a la vez

Es interesante, por la novedad, ir de una cima a otra sin bajar al valle. Si no recuerdo mal es la primera vez que, fuera de una carrera, lo hago. Y las primeras veces, si salen bien, siempre son las que mejor recuerdo dejan. Y además es divertido, sin paredes a ningún lado y con un patio que impresiona. Pero sin dificultad alguna.

En el collado que da acceso a la cima me paro a ver el camino por el que tendré que bajar. Pues no lo veo. Pues tiene que estar. Pues sigo sin verlo. Pues da igual, tiro para la cima y ya lo veré a la vuelta.
La subida a la cima es un poco más sucia. No hace falta trepar pero mejor ir con cuidado. En cima merece la pena buscar una buena piedra donde sentarse y dejar que te de un poco el sol mientras asimilas la belleza que te rodea.

Vuelta para atrás al collado y, esta vez si, encuentro el hito que marca la bajada. Jodo que bajada. Hay que prestar atención si no quieres rodar 500 metros para abajo hasta el ibón de Ip. Hace rato que me he quedado sin agua así que aprovecho un arroyo para llenar el bote. Como está lleno de cagadas de oveja le echo una pastillita de cloro y otra de sales. Por si las moscas.

Llego al ibón, cruzo la presa y ..... me encuentro otro arroyo que baja directo de la Collarada. Ala, fuera del bidón el agua recién recogida y a reponer aguita de la buena. La gana de comer ya es notoria así que busco un buen sitio al lado del arroyo, me quito mochila y zapatillas, meto la cerveza en el agua y me voy a buscar la subida a la Collara para darle a la cerveza tiempo a refrescarse.
fíjate que bujero más chulo
buena vida

Tampoco la encuentro. Pero ¿a quién le preocupa no encontrar el camino de subida cuando te espera una cerveza fría y un bocata de tortilla de longaniza? A mi no.

Cansancio, solete, barriga llena, prado, arroyo. Lo que viene siendo un conjunto sucesivo de acontecimientos interrelacionados que, inexorablemente, llevan a un único y posible destino: tumbarse a la bartola.

Con este panorama se me ocurren dos planes: subir a la Collarada (700+), bajar a Villanúa (2000-),  remontar a Canfranc estación (100+) y llegar justo para duchar y dormir. O bajar directo a Canfranc por la pista del Carretón, ducha y cerveza con libro en una terraza.




El libro va de una guerra mundial entre ........

lunes, 8 de julio de 2013

Estoy hecho un chaval. 2KV de Collarada


 Pruebas de esfuerzo en ci-clo-er-go-no-me-tro trapezoidal con toma de gases y conjugación del pretérito perfecto del indicativo. Venga ya, no me jodas. Si quieres probar si te pasa algo, te apuntas no a un kilómetro vertical no, sino a un doble kilómetro vertical, lo das todo y, si a la hora de comer tienes buena gana y te apetece repetir migas estando a 35º a la sombra, entonces es que estás echo un chaval. Y me río yo del lactato y del umbral anaeróbico. El umbral de migas y cerveza es lo que hay que medir, coño.

Y es que no solo me lo pasé bien, les tomé el pelo a las voluntarias (jóvenes) y saqué fotos. Es que en la primera hora batí mi plusmarca mundial de desnivel pasando de los 700m+ a nada más y nada menos que 800m+. Y no solo eso. En la segunda hora casi lo mantengo consiguiendo mi segunda mejor marca de todos los tiempos con 750m+ en una hora. Y otros 40 minutos para hacer cima.

¿Que a esa hora el ganador ya se había duchado? Y a mí qué, seguro que el no ha hecho fotos ni ha disfrutado del paisaje como yo lo hice. Y por supuesto no se paró a ver lo renqueante que yo subía cosa que yo si que hice para disfrutar viéndole bajar a él.

Como ya ha apuntado algún galgo por ahí, cada vez me gustan más las carreras con pocos participantes. Sobre todo si, como en esta, notas el cariño con que está hecha desde el momento en que te dan el dorsal. Es de agradecer, muy de agradecer, que un pequeño club organice una carrera tan espectacular como esta. Que pongan a gente en los pasos delicados para guiarte. Que nos tallen escalones en los neveros. Que equipen con cuerdas fijas la secciones peligrosas. Que lo monten todo para que podamos disfrutar de la fiesta. Y es de agradecer que le sepa dar este carácter realmente familiar. Que solo faltó que durante la comida alguien pidiera que se besaran los novios.

Para el año que viene la apunto fija en el calendario.

Y las afotos

Todavía con ganas de tontear


Al fondo el primer escalón

Todavía queda un buen cacho

Ya estamos cerca
Vistas desde la cima hacia un lado

Y vistas hacia el otro
Esta es guapa, guapa

Este buen hombre bajó justo detrás mío





martes, 25 de junio de 2013

RONDA DELS CIMS - (ABANDONO)

Un año y medio soñando con ella. Medio año preparándola todo lo que buenamente he podido, que ha sido más bien poco. Un mes sintiendo el miedo. Y todo, ¿para qué? pues ni más ni menos que para aprender. Aprender, debería decir mejor asentar conocimientos, de que en las carreras, y voy a hacer de filósofo de bar y decir que también en la vida, hay que disfrutar de cada pequeño instante como si fuera el último y el más importante. Que en un instante, sin saber porqué ni como, sin saber qué hacer para solucionarlo, sin poder optar por otro camino, sin merecerlo, la carrera, la vida, tal y como la programaste, tal y como la entendiste, tal y como la soñaste deja de existir.

Aprender que esto no tiene porqué significar un peor final, tan solo uno distinto. Que tan solo significa que algo o alguien o tú mismo te a echo cambiar de camino. Que solo queda asumir que es imposible ganar todas las batallas pero si que es posible ganar todas las guerras si eres capaz de, como dice la canción: reír y remar y cantar.

Todo esto viene que a abandoné la Ronda dels Cims en el kilómetro 41 de los 170 de la carrera. A las 11 horas de las 50 que tenía previstas.

No quiero hablar de la belleza del recorrido. Ni de la excelente organización. Ni de los campeones Nerea y Salva con los que tuve el placer de hablar un ratito. Ni de los voluntarios siempre fantásticos. Ni de las bellas y simpáticas chicas andorranas. Ni de los chicos del foro y mis amiguetes que nos siguieron en directo. Ni de mi amigo Carlos que sufrió tanto como yo cuando abandoné y un poco más cuando tuvo que hacerlo él.

Tan solo quiero darle las gracias a la sanitaria que estuvo conmigo, cuidándome y controlando mis constantes durante nada menos que una hora y media. No se tu nombre, pero espero no olvidar nunca tu cara. Gracias maña.

Y el año que viene, sin obsesión, espero volver a estar en la salida de la Ronda. No me importará estar o no en la llegada.

Roberto


jueves, 13 de junio de 2013

LA BELLEZA. INTEGRAL DE GUARA

Nunca dejará de sorprenderme la sierra de Guara. Nunca dejarán de extasiarme la discreta rotundidad de su belleza, agazapada detrás de todos sus rincones, dispuesta a hacerte parar de correr y dejarte turbado por un instante sin saber por qué o para qué has venido aquí, pero dando las gracias por estar ahí.

Como dijo el sabio "pequeña sería tu belleza si fuera yo capaz de describirla con palabras".

Bella pero hijaputa como la que más. De esas japutas que te hacen sufrir pero te gusta tanto que vuelves a por más. Y a por más. Y otra vez. Y al final ya no sabes si vuelves por la belleza o a que te de pol ..... Vicios que tiene uno.

Bueno, que me voy a temas para los que tengo pocas historias que contar. La carrera.

No murieron primogénitos ni bajó sangre por los ríos pero, atención noticia: llovió. Está siendo raro esta "invier-vera" que llueva. Pero este finde llovió. Salimos con lluvia a eso de las 8:30 todo rectos hacia el barranco de La Pillera que bajaba bien llenico de agua. Lo cruzamos, creo recordar que ocho veces. Al salir del barranco enganchamos la subidica al collado de Petreñales.

Como en mis buenos tiempos voy en el furgón de cola. Pero al pasar el avituallamiento del collado una emergencia técnica de alto nivel determina mi posición de farolillo rojo. Tan a gusto debía de estar que si me despisto un poco más me pasa el corredor escoba. Verme tal cara de gozo hízole apiadarse de mi alma y diome unos metros de ventaja.

Bien. Por fin. Lo conseguí. Tres años entrenando para esto. Voy el ultiiiiii. No el penulti, ni el antepenul. No. El ulti del todo. Y con diferencia. Qué sensación. Ahora entiendo al Kilian. Sólo me queda disfrutar durante otros 30 km, pensaba yo. No, no, no. Te equivocas zagal. ¿porqué? por que ahora viene HUMOR AMARILLO.

LAS ZAMBURGUESAS.
Bajando el collado de Petreñales buscando la ermita de La Fabana tenemos que cruzar el barranco del Abadejo, con más agua quel Ebro y más piedras que una cantera, dispuestas ellas por la organización de manera y forma que te hacían creer que eras capaz de pasar el barranco botando de piedra en piedra sin caer en la gélidas aguas. Pues no. Mentira. Te caes y te mojas.

LA PEDRERA MALDITA
La subida al Montidinera es por una pedrera. Y como iba el últi, no perdón el penul que en las zamburguesas alcancé a Santiago, todos mis compañeros precedentes se habían tomado la molestia de llenar las piedras de barro para que esbarizaran más. Si conseguías dar un paso sin caer dos para atrás sonaban las trompetas celestiales. Aquí pillamos a David

EL ESBARIZACULOS EMBARRADO
Que tenemos que bajar a un colladete, no problemo, qué mejor forma de hacerlo que por un esbarizaculos embarrado con pendiente tendiente a infinito. Al final los de la protectora de animales obligaron a la organización a poner una cuerda. Nenazas.
Aquí pillamos a Carlos y David se nos quedó por detrás.

LA CRESTA DIABÓLICA
Que tenemos que subir al Fragineto. Pues se sube. Que tenemos que volver al collado de Petreñales, pues vamos a ir por la cresta más afilada del mundo mundial. Que después de ver las fotos me alegro de las nubes  cubrieran todo porque si llego a ver el berenjenal en el que nos metieron para rato voy. Bueno, vale, no voy a mentir: si llego a saber que la cresta era tan criminal me llevo la cámara de fotos.

EL SUBIDÓN SUBIDÓN
Venga va, que ya queda poco dicen los del control. Ummmm, si esto es el KM 21, significa que vamos por la mitad, luego me queda la otra mitad que son 21 km. Menos un trozo que han anulado = joderrrrrr lo que me queda. Ala, parriba pal Tozal. Algunos van jurando en arameo mientras otros vamos haciendo cuentas de cuántas Integrales de Guara necesito sumar para tener una Ronda dels Cims. nononoono, no pueden ser tantas. Mejor pienso en otra cosa.

EL DRAGONKAN
Llegamos a la cima del Tozal donde nos encontramos con una de esas cosas que solo se pude ver en una carrera de este tipo: a 2ºC, lloviendo y con viento huracanado cuatro personas sonriendo nos esperan para darnos un poco de agua o de isostar. La buena mujer que me preparó el isostar revolvió los polvos con tanto cariño como hacía mi madre con el Colacao para que no hiciera grumos. No hay manera de agradecer la labor de esta gente. Los de la cima y los cualquier otro punto.

LA LLEGADA
Llegamos a meta y me hago el perro para fichar el último con la secreta esperanza de, por fin, ser el farolillo rojo de una carrera. Esperanza truncada un cuarto de hora después cuando llegó David. Pues que sepáis que voy a impugnar, que llegó fuera de control. Así que el último soy yo.

Nos encontramos a Jurraez que ha llegado DOS HORAS antes que nosotros. jope cómo está de fuerte. Felicito a Javisa porque, sin lugar a dudas, esta es la carrera más espectacular que jamás he hecho. Me ha dejado tan alucinado que seguro que este verano la repito por mi cuenta, incluyendo eso sí la parte anulada por el mal tiempo y que Javisa describió como la más bonita del recorrido. Tron, que te contraten para trazar más carreras, que lo bordas.

Y como siempre unas foticos para ilustrar al personal (y como casi siempre casi todas de Monrasín)











domingo, 2 de junio de 2013

And the wind blows Mary - Els Bastions Skyrace

Yo no se qué hemos hecho, pero en algún lugar del espaciotiempo sideral la hemos debido de liar parda. Pero ni idea de en qué.

Después de pasar el año pasado en la TM más calor que en el horno de una panadería, de ser tratados como parias en la Isostar del mismo año, haber pasado hambre en la Ultra de Xerta de este año y conseguir ahogar a las ranas en la Ultra de Barcelona ya solo nos quedaba que el viento fuera el culpable de la cancelación de Els Bastions de este año.Ahora me queda la duda de si en Andorra los ríos se convertirán en sangre o de si morirán los primogénitos. Glups qué tensión. Si fuera en Francia tendría clara mi preferencia. Pero para Andorra deseo ninguna de las dos.

En serio, jodo que aire. Ostia co, qué manera de soplar. Hablan de rachas de 150 Kmh y me parece que se quedan cortos. En el col de la Clovil, típico monte pelao de 2.000 metros, era absolutamente imposible ir derecho. A veces era imposible avanzar. No podía siquiera usar los bastones porque se me los llevaba el viento y me se cruzaban en las piernas. Pensé en grabarlo pero no tuve valor ni fuerzas para sacar la cámara. Pensé: si me paro ahora caigo rodando para atrás.

Cuando Carlos me alcanzó pude gritarle: esto va a ser inhumano.

Visto con perspectiva veo que sabía que iba a ser un infierno. Y sabía que lo que nos quedaba, a más altura, de noche y cansados iba a ser todavía peor. Sin embargo estaba más preocupado por mi rodilla que por las condiciones de la carrera. Me tengo por un tipo sensato, de los que saben valorar el riesgo y conoce muy bien sus propias capacidades. Yendo solo he dado muchas veces la vuelta y me siento orgulloso de las veces que he abandonado una ultra. Sé lo que hago.

Antes de ayer no sabía lo que hacía hasta que un miembro de la organización me dijo: hasta aquí hemos llegado. No hicieron falta explicaciones ni datos meteorológicos ni excusas, en un instante entendí que, en esas condiciones, era una estupidez continuar. Y creo no equivocarme si digo que los 40 ó 50 participantes a los que nos pararon en Planoles pensaban exactamente lo mismo.

Hasta antes de ayer, cuando leía los debates sobre si, en caso de malas condiciones meteorológicas, el organizador debía suspender la prueba o confiar en la capacidad del corredor o sobre la cantidad de material obligatorio a llevar, no sabía de qué lado ponerme: la organización tiene una responsabilidad si, pero yo ya soy mayorcito y sé lo que hago.

Hoy lo tengo claro: la opción más segura para el corredor es la correcta.

Así que agradezco a la organización que parara la prueba. Si Dios y sus plagas lo permiten el año que viene nos vemos por allí. Porque la carrera bien lo merece.

Escuchemos al amigo Hendrix para que nos cuente que dice el viento y nos quite el mal gusto


Y unas fotitos





martes, 30 de abril de 2013

UltraTrail de Barcelona - WaterWorld

SINOPSIS
En un mundo dominado por las aguas, los lodos y por las organizaciones un poco desorganizadas un par de miles de tarados que no tienen perdón de Dios deciden darse al mal vicio de correr por el parque del Garraf.

DIRECTOR, PRODUCTER, CAMERA, SCRIPT GIRL, DRIVER & ASSITANT
Nuria "Mevoyaperder"

MAIN CHARACTERS
Carlos "Cuantoqueda" y Roberto "Dondeestalacomida"

DESARROLLO

Hombreee, vamos a ver, una cosa es que llueva y otra es que no pare de llover, que hasta los caracoles se quejaban de tanta agua. Leches, que nos chupamos más de 20 horas por el monte y de ellas 16 lloviendo. Que si llegamos a ser Gremlims repoblamos la Tierra en un par de horas. Menos mal que somos puros machos y por verguenza, que no por falta de ganas, no abandonamos.

Nos presentamos en esta ultra como parte del entrenamiento que nos lleva a Andorra. 113KM y 5.000m+ ya en Abril iba a ser un buen entreno. Junto con los de la ultra salían los que querían hacer las otras tres distancias menores que la organización ofrecía. En total más de 2.000 personas íbamos a salir a la vez el sábado a las 10 de la mañana.

Uno ya es perro viejo y, previendo el tapón que seguro que iba a suponer que 2.000 personas entraran en un sendero optó por ponerse en la parte delantera del cajón de salida. No delante del todo para no molestar a los que competían pero casi casi. Brujo que es uno en el primer sendero se montó el belén. Casi media hora para hacer un kilómetro bajo la lluvia. Unas risas. En el segundo sendero otro tapón y otra media hora para hacer otro kilómetro. Total que los 10 primeros kilómetros nos costó hacerlo más de dos horas. Como el  primer corte horario estaba en 6 horas en el KM 31 decidimos pretar el paso para que no nos ocurriera lo de Xerta.

En cinco horas nos plantamos en el control donde nos esperaba nuestra mochila del corredor. Nunca he agradecido más una camiseta de propaganda. De propaganda pero seca. Seca, del verbo no mojada, que en presente se conjuga "yo estoy seco", en pasado "antes estaba mojado" y en condicional "si lo llego a saber para rato me pillan".

Bien comidos y bebidos continuamos con la camiseta seca durante unas pocas horas que tubo a bien dejar de llover. Pero poco dura la alegría en casa del pobre y cuando llegó la noche y llegábamos a la bajada más técnica nos metimos dentro de una nube más oscura que el alma de un político. Y como un político con escaño se agarró al asiento y no nos dejó ya en toda la carrera.

En un control nos informan que han eliminado un tramo de la carrera por lo peligroso que estaba tras las lluvias. Ya se que los ultreros lo que queremos es sufrir mucho y hacer todos los kilómetros del mundo, pero la cara de alegría que pusimos todos cuando nos lo contaban dejaba a las claras las ganas que teníamos de acabar con aquello.

Los cuarentaytantos kilometros que quedaban para meta pasaron despacio, muuuuy despacio. Sin embargo, a pesar de no habernos divertido durante ningún tramo de la carrera se notaba en nosotros una cara de satisfacción producto sin duda del saber que aguantando habíamos dado un gran paso hacia Andorra. Curioso resulta que nuestras inflamadas rodillas no sean consideradas como un castigo sino como un mal menor o incluso como una prueba de que bajo la lluvia y con las rodillas castigadas somos capaces de acabas casi sin quejarnos.

Creo que hemos dado un gran salto en nuestro nivel de confianza. ¿más dura será la caída?

Si en casi todas las carreras los voluntarios marcan un nivel superior al de el resto de la organización. En algunas, como la Calcenada o la Jorgeada son sin duda el alma de la prueba. En esta su nivel fue superlativo. Es difícil a gradecer que alguien que no te conoce aguante horas bajo la lluvia esperándote y que cuando te ve aparecer corra a por un sandwich o un plato de pasta. Gracias buenas gentes, gracias.

Y de fin unas fotos, casi todas de la organización.
chula ehhh

creo que el de la izquierda no es corredor

aguaaaa

no es la cosa del pantano, soy yo

40.000 pelas de zapatillas. Si lo viera mi madre se moría del disgusto

ese Jurraeeeeez

lunes, 8 de abril de 2013

Sumachigún - Pedalendo por la Sierra de Vicort

Anda que no tenía ganas ni nada de sacar la sumachigún y darme una buena paliza por la Sierra de Vicort. Porque a lo tonto, entre problemillas personales y el mal tiempo, esta era la tercera o la cuarta vez en este año que intentaba hacer esta ruta.

¿Que por qué se llama sumachigún mi bici? Pues porque soy tan paquete que voy siempre con el molinillo puesto y parezco una metralleta de la cadencia que llevo.

Tenía tantas ganas de salir que cuando, el día de antes, miré la previsión meteorológica, de todos los datos ofrecidos por la distintas páginas que miré, mi cerebro solo se quedó con uno: sol. De la parte de 1ºC y la de nieve en la provincia a 1.000m ni me enteré.

Así pues, mi sorpresa fue mayúscula cuando al llegar a La Muela vi toda la sierra de Vicort blanca como en mi vida la había visto, y mira que he la he visto veces yendo al pueblo. Hasta ayer, cuando leía lo de nieve a 1.000 metros en la provincia de Zaragoza pensaba ¿a 1.000 metros de dónde? Será de la cima del Moncayo, porque desde mi oficina es en el único sitio de la Zaragoza donde se ve nieve. Se ve que no es eso.

Y qué decir de la temperatura de 1ºC. Total, si hay sol tampoco pasaré mucho frío ¿no?. No, tú no, listo del haba, pero tus pies y tus manos con tus recién estrenados guantes de verano se van a cagar en tus muelas.

Superados estos inconvenientes logísticos la ruta no podía empezar mejor. Nada más salir de Aluenda, todavía en la vieja Nacional-II se me cruzaron tres jóvenes corzos. Qué gusto, qué maravilla, qué gozo verlos. Huyeron remontando un talud de la carretera con mayor facilidad y gracilidad de la que yo subo un bordillo. Bueno,  con gracilidad dos de ellos porque el tercero se resbaló y se calzó una ostia del quince. Eso si, se levantó con regia dignidad y en su mirada leí: la culpa es tuya, que me has puesto nervioso, que yo de normal me subo esto a la pata coja.

Entrar en el bosque me deparó una segunda sorpresa. Oí una gran rama crujir y yo, que no me he perdido ni un solo capítulo de Texas Walker Ranger, supe al instante que solo un cochino jabalín podía ser el causante. Justo, en toda la diana. Vi correr un cochino jabalí que, como cualquier otro mamífero del bosque, mejor hubiera estado en chorizos.

Pero no se vayan todavía, aún hay más. Poco después comencé a ciclar (¿esto es Español?) por una recién caída nieve solo mancillada por las huellas de unos paisanos andarines a los que alcancé en la pista que llanea bajo los radares. !!!!!Ir en bici por la nieve¡¡¡¡¡¡ !!!!!1fliiiiipa¡¡¡¡

No vi a nadie más hasta la senda que baja a Inogés donde me encontré a un par de corredores que me advirtieron de que la nieve caída me iba a impedir montar la bici hasta que llegara al valle. Anda que no son exageraos ni nada estos corredores de montaña. En cuanto la pendiente se suavizó me subí en la sumachigún y en una suerte de bicisky bajé hasta el llano donde el sol ya había derretido la nieve convirtiendo las pistas en riachuelos improvisados. Muy bonitos para la vista pero no tanto para la temperatura de los pies. Hasta tal punto que, en Inogés, me tuve que para al sol, quitarme zapatillas y calcetines y ponerme la chaqueta en los pies para hacerles entrar en calor.

Continué la ruta hacia Viver de Vicor que, por si no lo sabíais, es el pueblo en el que Cristo perdió las alpargatas. No tienen ni bar, ni fuente, ni de ná. Aislamiento total. Como tenía ganas de guerra continué hasta el puerto de Codos y luego vuelta para atrás a deshacer el camino.

Claro que como ya era hora de comer y el sol pegaba fuerte, la nieve se había derretido y los pocos coches que habían pasado habían convertido el camino en un auténtico barrizal. Bueno para el biker pero no tanto para la lavadora. Que si llego a encontrar un chino abierto me compro unos guardabarros.

A lo tonto me salieron 45KM y, según Garmin 2.000 m+. Viendo el perfil a mi no me salen más de 1.500 m+, pero claro, si la multinacional con sus satélites, su altímetro barométrico y sus mapas satélite de la NASA me pone 500 más yo no le voy a decir que me los quite.

Unas fotos para ilustrar el evento






domingo, 17 de marzo de 2013

Ultra les Fonts

Segunda etapa en la que acompaño al amigo Carlos en su proyecto solidario de Masquedeporte.com. Esta vez se vino con nosotros Nuria para inmortalizar en vídeo los acontecimientos que voy a relatar. Vaya currada se metió la colega. Cómo se dio vida para hablar con unos y con otros y que le indicaran cómo llegar a los avituallamientos y así poder seguir a Carlos. Normal que a la vuelta a Zaragoza cayera rendida en el coche como un bebé. Enhorabuena por tu trabajo.

Iba yo con una buena preparación a la prueba. Había hecho unas cuantas salidas largas, había descansado la semana de antes, había comido bien y hasta había tenido fiesta el viernes para poder descansar. Carlos, por el contrario, no había entrenado nada de nada y, debido a problemas personales afortunadamente ya solucionados, tampoco había podido descansar. Se olía en el ambiente una repetición de la carrera del Pastisset.

1er día. La nocturneta.23KM, 350m+

No acabo de entender muy bien esta carrera. En un entorno como el de el parque de Els Ports nos colocan una carrera que es prácticamente toda por pista. Supongo que al ser nocturna la organización optará por el menor riesgo para los corredores que presenta una pista frente a un sendero. En cualquier caso la lluvia que cayó le dio ese punto de aventura que quitan las pistas.

Me quedo con dos momentos. Unos kilómetros antes de Andover nos juntamos seis desconocidos que hicimos juntos uno de los pocos senderos que había. Bajo la lluvia fue mágico.

El segundo fue al poco de comenzar cuando reconozco una voz que me llama. ¡es Mariote! joder, si que es verdad que está jodido para ir tan lento. Qué alegría me llevé al verle, aunque hubiera preferido verle en su lugar natural: las primeras posiciones.

2º día. Trail de les Fonts. 70KM 4000m+

Hay días que, sin razón alguna, te levantas tan apático que no te apetece ni `comer tortilla de patara. Pues así me levanté el sábado.
Tomamos la salida y empezamos a trotar por pistas, "mierda más pistas". Carlos va tirando de mi, es normal, me digo, el va mucho mejor que yo en pista. Dejamos la pista para seguir una acequia que, con las lluvias caídas  está bastante resbaladiza. Me calzo una ostia que me deja escocida la rodilla y Carlos se me escapa. Lo cojo en el vado de un arroyo que baja bastante lleno y empiezo a darme cuenta de que algo va mal: no me hace ilusión vadear un río. Pero Rober, tío, si cruzar ríos es de lo mejorcico de correr por el monte!!! What is japeninggg???

Empezamos a subir por sendero y Carlos sigue marcándome el ritmo. Esto ya si que no es normal. Para acabar de joderla en la bajada noto un pinchazo en los ligamentos de la rodilla derecha. Sé que significa eso: que el próximo paso me va a hacer llorar de dolor. Dicho y hecho casi me voy al suelo del dolor. Me cuesta andar y se que a este ritmo no voy a acabar. Le digo a Carlos que se vaya pero, el muy tonto, decide quedarse conmigo.

Llegamos al primer corte horario, puesto en Prat del Compte, casi con media hora de margen, no mucho pero más de los 10 minutos que un estalentao dice que tenemos. Carlos se da cuenta de que si sigue mi ritmo no va a pasar el siguiente corte horario y después de pedirme permiso con la mirada tira para alante.

Me viene a la cabeza la máxima de "yo no me retiro, a mi que me echen" así que decido continuar hasta que la organización tenga a bien echarme. Si hasta ahora realizaba la prueba sin mucha ilusión a partir de ahora fue una continua búsqueda de excusas para poder abandonar. Desgraciadamente no conseguí encontrar ninguna lo suficientemente convincente. Veo cómo Carlos se aleja: podía tener la decencia de reventar y así yo tendría excusa para abandonar. Pero no, el tío sigue. Kilómetros más adelante casi le doy caza, pienso que ahora si, que la falta de entreno y descanso han echo mella y está a punto de reventar. Por la noche en el hotel me dice que si, que iba a reventar, pero que si le estaba alcanzando fue porque, literalmente, le reventó una uña del pie.

Me enchufo el segundo ibuprofeno para poder andar la cuesta abajo hasta el avituallamiento de Sant Roc. Llego justo en el tiempo de corte y Nuria me informa de que Carlos acaba de salir hace un 5 minutos. Bien, se está recuperando.

Continuó hacia el siguiente avituallamiento que está en el KM 53 en el pueblo de Alfara. Al llegar un miembro de la organización me informa que he llegado media hora tarde al tiempo de corte y que tengo que entregarle el chip y el dorsal. Le entrego el chip sin rechistar pero le digo que me quedo con el dorsal de recuerdo. Afortunadamente Nuria me da una buena noticia: Carlos ha salido hace media hora, todavía dentro de control.

Me siento, me como un bocadillo, me enchufo una cocacola y el par de neuronas de la tontería que todos tenemos hacen contacto y pregunto a la organización si todavía están las balizas puestas. "Aquí tienes al equipo escoba" es su respuesta, "así que mientras no salgan ellos el camino estará balizado".

Bien, ahora solo queda una cosa: finalizar la prueba aunque sea fuera de control. Así pues, con la alegría que me ha faltado durante toda la prueba salgo hacia el siguiente avituallamiento. Durante el camino se me hace de noche y varias veces pierdo el camino, normal la organización no había previsto que alguien tan lento como yo llegara hasta aquí y no había puesto reflectantes en la balizas.

Llego al último avituallamiento en la Font Nova donde otro voluntario me pide chip y dorsal. A buenas horas mangas verdes. Le cuento mi historia y me responde que vale, que muy bonita chaval, pero que hasta aquí has llegado, que de aquí ha salido otro equipo escoba hace diez minutos y ya no tienes balizas. Je suis desolé (en cristiano: venga no me jodas). Bueno, por lo menos Carlicos va a acabar.

Vista mi desolación otro voluntario me indica cómo llegar hasta Xerta por la pista por la que han subido con los coches. Olé tus cojones, eso si que son buenas noticias. Me pongo en marcha, y hasta troto por la pista buscando la meta. Casi en la carretera me alcanza el coche que conduce Nuria y entre ella y el voluntario que lleva me convencen para que suba. Total solo quedan 2 KM para Xerta y los 70 de la prueba ya los has hecho. Pues nada, arriba se ha dicho.

Cuando llegamos nos encontramos a Carlos debatiéndose entre la alegría de haber finalizado y el dolor que siente en todas las partes de su cuerpo. De momento gana el dolor. Por goleada.

3er día. Cursa de les Fonts. 27KM 1.700m+

Decido no salir y hacer algo que siempre he tenido ganas de hacer: ver cómo corren los primeros, los que de verdad corren.

Despedimos a Carlos en la salida. En su mirada leo que va a acabar. Pero también leo un "maldita la hora en la que me metí en esto". Seguro que durante las cinco horas y media que le quedaban por el monte lo pensó muchas más veces. Pero seguro que desde que entró por fin en meta  no se le ha vuelto a pasar ni una sola vez más por la cabeza.

Me fui con Nuria hasta el avituallamiento de la Font Nova y remontamos el sendero de la carrera durante una par de kilómetros hasta que encontramos un sitio chulo para filmar. Ver pasar a los primeros fue motivador, sobre todo cuando vi a los chicos de Zaragoza. ¿así corro yo? joer qué estilazo me gasto. Ver pasar a los últimos fue desolador: "va a ser que no, que no corro como los primeros, que renqueo como los últimos"

De los últimos viene Carlos, renqueante como el que más, dolorido como ninguno. Le acompaño hasta el avituallamiento donde le miento vilmente: "tranqui, que ya es todo cuesta abajo" . Jeje, pensaba que se le olvidaría mi comentario pero ya en meta me lo recordó varias veces: "cabrón, que quedaban dos cuestas, cabrón".

Cinco horas y media después de la salida de hoy, veintitres horas después de la salida de viernes, Carlos, dolorido y requeante acaba la Ultra de le Fonts. Bravo.

Unas afotos que el sitio se lo merece.